Los conejos son llevados al consultorio con frecuencia para la castración. Si bien la castración de los machos y la realización de la ovariohisterectomía en las hembras pueden ser considerados procedimientos quirúrgicos rutinarios, el cirujano deberá conversar con los propietarios acerca de asuntos éticos, indicaciones y expectativas del procedimiento y posibles alternativas antes de llevar a cabo la cirugía. En este artículo se describirán la preparación prequirúrgica del paciente, las técnicas quirúrgicas y los cuidados postquirúrgicos.
La castración es un procedimiento quirúrgico realizado de manera rutinaria en los conejos domésticos. Tanto los machos como las hembras son castrados para evitar la reproducción y para evitar conductas no deseadas. Las hembras son también castradas para evitar el desarrollo de patologías uterinas. La castración de los machos y la ovariohisterectomía de las hembras pueden también ser realizados como tratamientos específicos o por alteraciones de la conducta. La castración de los machos es un procedimiento relativamente simple, aunque la castración en hembras es técnicamente un mayor desafío, en particular en las hembras obesas. La anestesia, la técnica quirúrgica y el manejo perioperatorio (con particular atención al control del dolor) son factores muy importantes para alcanzar un final exitoso de la castración en conejos. Además, el cirujano debe conversar con el propietario, antes de programar el procedimiento, aspectos relacionados con la ética, el bienestar, indicaciones y resultados, a los efectos de generar expectativas apropiadas.
David Perpiñán