Coordinador de sección Juan Carlos Troiano
Autora
Sandra Ierino Vet. Esp. Dipl.
En la clínica diaria, observamos con mucha frecuencia, aves cuyas patologías tienen origen en una mala alimentación.
El abordaje de este tema requiere conocer la taxonomía, anatomía, alimentación natural, hábitos alimenticios y la edad del ave; ya que los requerimientos nutricionales varían en las distintas etapas (pichón, juvenil, adulto) y condiciones (cantidad de ejercicio, reproducción, estación del año, estado de salud).
En la actualidad, hay suficiente evidencia científica que refuerza la importancia de la alimentación; no solo a nivel nutricional sino también para la actividad funcional de la microbiota intestinal, ligada directamente a la salud (fig. 1).
El tracto gastrointestinal de las aves se encuentra colonizado por múltiples microorganismos que conforman la microbiota. La biodiversidad y el equilibrio de esa microbiota se relaciona directamente con la salud del ave.
Cerca del 75% de todas las células de defensa del organismo están ubicadas en el intestino, en forma de tejido linfoide.
Reseña anatómica del aparato digestivo
Por su adaptación al vuelo, el sistema digestivo tiene una menor área de digestión y absorción, menor tiempo de retención del contenido y menor eficiencia en la captura de nutrientes en comparación con los mamíferos.
Esto representa la mayor barrera inmunológica contra los patógenos externos que pudieran ingresar a través de la vía oral.
El aparato digestivo comienza en el pico, cuya forma y función depende de la alimentación.
Pico
El estuche córneo que recubre el pico se denomina ranfoteca.
Cavidad orofaríngea
Carece de paladar blando. En la parte dorsal se encuentra una abertura denominada coana que comunica la cavidad oral con el aparato respiratorio (fig. 2).
Lengua
Su forma se adapta a la del pico. En las aves palmípedas posee papilas filiformes que, junto con las laminillas córneas del pico, actúan como una barrera para filtrar el alimento. En las psitácidas la lengua es musculosa y muy móvil.
Glándulas salivares
Son escasas excepto en algunas especies insectívoras.
Esófago
Recorre el cuello por la derecha En las anátidas, en su porción caudal, existe un acúmulo de tejido linfoide denominado amígdala esofágica.
Buche
Es una dilatación del esófago que no está presente en todas las aves. Su función es la de reservorio de alimentos. En las columbiformes, su mucosa secreta es una sustancia rica en proteínas, denominada caseína o leche del buche que es utilizada para alimentar a sus pichones.
Proventrículo o estómago glandular
Segrega mucus, enzimas (pepsina) y ácido clorhídrico.
La cantidad de enzimas y ácido clorhídrico es variable según la especie y su tipo de alimentación. Las rapaces y los carroñeros tienen una mayor proporción de ácido clorhídrico que otras aves.
Molleja o estómago muscular
Tiene una pared muscular muy desarrollada, en especial en las aves granívoras como las gallinas, que ingieren el grano entero.
Tiene como función la trituración del alimento. En aves rapaces contiene los desechos alimenticios (pelos, plumas, huesos), que son compactados y regurgitados en forma de egagrópilas.