Las fuerzas aplicadas sobre el hueso son las responsables de que se produzca una fractura. La manera en que la diáfisis de la cortical ósea se rompe está determinada por el tipo de fuerza.
Las fuerzas indirectas son las que actúan a distancia del foco de fractura. Resultan de tensiones normales y tangenciales a las cuales se ve sometido un hueso que soporta una carga. Cuando el valor de dichas tensiones es mayor que la resistencia del hueso (tensión de rotura), sobreviene la fractura.
José Mª Carrillo Poveda; Mónica Rubio Zaragoza; Elena Damiá Giménez